Es posible que esto haya ocurrido en otras épocas de la historia ya que todo es cíclico, pero es determinante que la crítica y la concienciación se extienda para que el ser humano no tropiece con la misma piedra.
Ya es bastante triste que el vandalismo se haya manifestado en los parques, las papeleras, las señales, ...en casi todos los rincones de la construcción moderna pero lo que es aún más triste y algo imperdonable es que últimamente a estos descerebrados les de por destrozar para siempre tesoros que estuvieron intactos durante miles, incluso millones de años.
Hay muchos ejemplos pero quisiera destacar algunos como el que se produjo el año pasado en el parque nacional de Brecon Beacons en el Reino Unido. Un hermoso menhir o megalito de unos cuatromil años conocido como Maen Llia apareció de repente pintado con spray grafitero.
Esto, siendo tan grave, parece poco con lo que ocurrió en Irak en donde destrozaron tesoros antiquísimos en museos y monumentos.
Pero esto, a su vez, siendo tan tan grave, parece aún menos con el vandalismo que está sufriendo nuestro planeta al que le llevó miles de siglos formarse hasta tener la belleza que tiene y ahora en cuestión de un ridículo espacio de tiempo el ser humano (o alguien que odia el ser humano y el planeta Tierra) está destrozando de forma irreparable la vida de los océanos, la atmósfera alterada por los chemtrails, el espacio lleno de basura espacial, se están extinguiendo para siempre animales que existieron durante mucho tiempo, se altera la genética de muchos seres vivos que se mantuvo de forma natural durante millones de años, ...
Del vandalismo urbano a los crímenes globales sobre este planeta sólo hay un paso, están en aumento y el ser humano demasiado dormido para defenderse o pararlo. Esos monumentos destrozados, pintados para siempre son sólo un presagio del futuro del planeta.
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